Tiempo Ordinario
Mira a tu alrededor, siente la brisa y experimenta el calor amoroso de Dios
Porque la palabra de Dios tiene vida y poder. Es más cortante que cualquier espada de dos filos, y penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta lo más íntimo de la persona; y somete a juicio los pensamientos y las intenciones del corazón.
Hebreos 4:12
¿Te ha pasado que sales de paseo y de momento te percatas que te has perdido? ¡A mi me ha pasado muchísimas veces! Salgo con mi esposa a visitar un lugar y tomo la ruta incorrecta y se me dificulta llegar al destino. En ese momento me entra el desespero, me pongo de malhumor y hasta los nervios me traicionan. Sin embargo, recuerdo que tengo a mi alrededor herramientas claves que me ayudarán a retomar la ruta correcta. Por un lado mi esposa, que conoce muy de direcciones y rutas. Y por supuesto, también está el famoso GPS, que me va a dirigir e incluso me puede decir hasta como evitar el tráfico o cualquier obstrucción en la carretera.
Lo mismo pasa en nuestras vidas cuando permitimos que Dios por medio de su palabra nos dirija. Muchas veces nos sentimos perdidos y desorientado, sin sabe qué hace o qué decisión tomar. No obstante, Dios a través de su palabra, ilumina nuestro caminar, nos da paz, y nutre nuestro ser para que podamos seguir y llegar salvos y seguro al lugar que Él ha marcado para ti y para mí.
Pregunta para reflexión: ¿Estoy permitiendo que Dios por medio de su palabra dirija mi vida?
Amado Dios, en ocasiones me he sentido confundido y perdido. Necesito que tú seas mi guía. Dirígeme con amor y gracia por medio de tu palabra que es lámpara a mis pies. Amén.
Levántate y camina. No estás solo, ni sola. Dios es. Dios está