Tiempo Ordinario
Cierra tus ojos y busca una total conexión con Dios. Piensa en Dios y examina lo que estás recibiendo en este momento.
¡Aleluya! Alabaré al Señor con toda mi alma. Alabaré al Señor mientras yo viva; cantaré himnos a mi Dios mientras yo exista.
Salmos 146:1-2
El cantante puertorriqueño Frankie Ruiz fue muy reconocido en el mundo de la salsa en los años 80. Desafortunadamente, su vida fue impactada negativamente por el resultado de excesos de alcohol y drogas. Una enfermedad seria llegó a su vida y sus esfuerzos para seguir cantando se vieron limitados. Fue en ese punto cuando Frankie Ruiz reconoció a Dios y quiso dedicar su último tiempo de vida para alabarle. En su última canción, titulada Vuelvo a Nacer, agradece a Dios por su vida y comparte que es una nueva persona con esperanza. El alabar aún en el último aliento, como dice el salmista, es agradecer a Dios en esperanza y confianza no importando el tiempo que tengamos por vivir en este mundo. Las enfermedades y las dificultades de la vida llegan. Pero que nunca nuestro aliento deje de tener la confianza en Dios. De esa manera siempre estaremos alabándole.
Rev. Abner Cotto-Bonilla
Pregunta para reflexionar: ¿Cuántos alientos al día dedicas para alabar a Dios?
Dios, en esta hora te alabo por lo que eres y lo que has hecho en mí. Así como Frankie Ruiz, quiero volver a nacer todos los días para alabarte y dedicarte hasta mi último aliento. Amén.
Sigue hacia adelante y nunca dejes de compartir lo que has recibido de parte de Dios.