Tiempo Ordinario
En ocasiones, olvidamos cuán grande es el amor de Dios para con nosotros. Por eso es necesario que te detengas y recuerdes que Dios te ama, Dios te llama, Dios cuenta contigo y tú puedes contar con Él.
Si hablo las lenguas de los hombres y aun de los ángeles, pero no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o un platillo que hace ruido. Y si tengo el don de profecía, y entiendo todos los designios secretos de Dios, y sé todas las cosas, y si tengo la fe necesaria para mover montañas, pero no tengo amor, no soy nada. Y si reparto entre los pobres todo lo que poseo, y aun si entrego mi propio cuerpo para tener de qué enorgullecerme, pero no tengo amor, de nada me sirve.
1 Corintios 13:1-3
La actitud que asumes ante una acción o decisión marca la diferencia en ti y en tu entorno. El escritor describe que podemos llevar a cabo las mejores acciones pero una actitud desprovista de amor provoca que la misma sea insignificante. Es posible que hayas escuchado esa expresión que dice, “la intención es lo que cuenta”. Cuando eres intencional en tus acciones y decisiones, el resultado se verá enriquecido por esa intención. ¿Te has preguntado alguna vez, con qué intención haces las cosas? ¿Por qué decides servir, amar o compartir? ¿Lo haces desde el corazón o lo haces para que otros te vean? No es lo mismo tener la intención de vivir, que vivir con intención. Por eso te invito a que reflexiones en tus próximas tres acciones o decisiones, reconociendo la intención de las mismas.
[devotion_author_profile]
Rev. Luis F. Campos
Pregunta para reflexionar: ¿Qué actitud necesitas mejorar para vivir con intención?
Dios, gracias porque me amas profundamente. Ayúdame a tomar decisiones intencionales para mi beneficio y el de otros. Confío en que tu palabra y tu amor me darán dirección en todo. Amén
¡Camina en fe! Cuando no sepas por dónde ir, su amor y su palabra te mostrarán el camino por donde debes andar.