escucha

Si ustedes aman solamente a quienes los aman a ustedes, ¿qué hacen de extraordinario? Hasta los pecadores se portan así. Y si hacen bien solamente a quienes les hacen bien a ustedes, ¿qué tiene eso de extraordinario? También los pecadores se portan así. Y si dan prestado sólo a aquellos de quienes piensan recibir algo, ¿qué hacen de extraordinario? También los pecadores se prestan unos a otros, esperando recibir unos de otros. Ustedes deben amar a sus enemigos, y hacer bien, y dar prestado sin esperar nada a cambio. Así será grande su recompensa, y ustedes serán hijos del Dios altísimo, que es también bondadoso con los desagradecidos y los malos. Sean ustedes compasivos, como también su Padre es compasivo.

Lucas 6:32-36

piensa

Todos tenemos la capacidad de dar y perdonar, incluso aquellos que no siguen la justicia. Sin embargo, quienes siguen a Jesús y practican el amor y la justicia reflejan la verdadera familia de Dios. No se trata solo de hacer el bien ocasionalmente, sino de vivir con un compromiso genuino con la compasión y la justicia en el día a día. Ser parte de la familia de Dios no significa simplemente seguir reglas, sino reflejar su carácter en el mundo. Jesús nos enseñó que el amor es lo que nos distingue y nos une. Al amarnos unos a otros con sinceridad, mostramos que somos su pueblo, llamado a impactar el mundo con su amor. Este amor nos impulsa a ver a los demás con misericordia, a perdonar sin reservas y a actuar con justicia, incluso cuando es difícil. Al vivir así, no solo seguimos a Jesús, sino que llevamos su luz a un mundo que necesita esperanza, restauración y verdad.

Samuel Estrella Molina

Pregunta para reflexionar: ¿De qué manera puedes reflejar el amor de la familia de Dios en tu vida diaria?

Ora

Señor, hazme un reflejo de tu familia, viviendo con compasión, justicia y amor.

Ve

Sal al mundo con la conciencia de que eres un ser creado para amar, servir y vivir en conexión con todos.