Following the Star

pausa

Respira, respira profundamente para enraizarte. Echa los hombros hacia atrás, siente el suelo bajo ti. Cuando te hayas asentado, vuelve a respirar profundamente diciendo o pensando

INHALE: Aferrarme al gozo no significa que siempre sea feliz
EXHALA: Significa que no me dejaré vencer por la desesperación

escucha

La gente estaba llena de expectación y todos se preguntaban si Juan sería el Cristo. Juan les respondió a todos: «Yo os bautizo con agua, pero viene el que es más poderoso que yo. No soy digno de desatar la correa de sus sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego. Con otras muchas palabras, Juan apeló a ellos, proclamando al pueblo la buena nueva.

Lucas 3:15-16, 18

piensa

Las expectativas son complicadas. Por un lado, es bueno tener una idea de lo que esperas en un momento dado de una variedad de personas para una variedad de situaciones. Las expectativas nos ayudan a prepararnos física, mental y emocionalmente. Lo complicado es cuando lo que esperábamos no es lo que es o lo que esperábamos. Cuando esperamos que algo sea de una determinada manera, podemos malinterpretar lo que ocurre porque no estamos abiertos a posibilidades más allá de nuestras expectativas. Juan el Bautista apareció y la gente empezó a preguntarse si él era el Cristo que esperaban, aquél del que habían hablado las Escrituras. El que iba a mejorar las cosas. Juan era importante porque estaba preparando a la gente para esperar más, imaginar más, pensar en posibilidades que aún no se habían atrevido a soñar. Por eso Dios envió a Jesús: para hacernos saber que Dios tiene aún más, no sólo para una persona, sino para todos nosotros. Mientras recorres este día, te animo a que identifiques cómo podrías imaginar más posibilidades en medio de tu día a día.

Amy Kim Kyremes-Parks

Pregunta para reflexionar: ¿Cómo puede influir tu fe en tus expectativas?

Ora

Dios de infinitas posibilidades,gracias por enviar a Jesús para recordarnos que siempre hay más y que tu amor es increíblemente expansivo. Ayúdanos a parecernos más a Juan el Bautista, dispuestos a preparar el camino para más y a dar esperanza a la gente en medio de cada día. Oramos por la imaginación y la expectación a medida que se desarrolla esta temporada de seguimiento de la estrella. Amén.

Ve

Tú eres el Dios de la justicia

Tú eres el Dios que ve

Tú eres el Dios que sana y

Que amas al mundo a través de mí

Creemos que nuestro amor puede cambiar las cosas

No viviremos en silencio

Tú eres el Dios de la justicia

Tú eres el Dios que ve

Tú, oh Señor, estás con nosotros

No tendremos miedo