Back to School
¿Qué llevas en la mochila? ¿Qué llevas? A veces cargamos con cosas que no nos corresponde llevar. En esos momentos, deja esas cosas a un lado. Hoy, elige llevar la justicia, la bondad y la humildad.
«Felices los humildes, porque heredarán la tierra».
Mateo 5:5
En la escuela primaria, cuando se acerca Acción de Gracias, los profesores suelen pedir a los alumnos que escriban o dibujen aquello por lo que están agradecidos. A medida que nos hacemos mayores, puede que no nos paremos a pensar mucho en el agradecimiento. En lugar de centrarnos en lo que agradecemos, nos fijamos en lo que no tenemos. Estamos celosos de que otra persona tenga lo que nosotros queremos, o somos arrogantes porque tenemos lo que otra gente quiere. Jesús dice: «Dichosa la gente que es humilde». Una forma de pensar en la humildad es pensar en el agradecimiento. Cuando estamos agradecidos, prestamos atención a las cosas que tenemos o podemos hacer, a los regalos de cada día. Ser agradecidos nos ayuda a recordar a las personas que nos han ayudado en el camino, en lugar de envanecernos. Centrarnos en aquello por lo que estamos agradecidos desvía nuestra atención de nosotros mismos y cambia nuestra actitud hacia las personas y las cosas. «Felices las personas humildes», porque son agradecidas, y la verdadera gratitud las aleja de los celos, la arrogancia y la comparación.
Laura Edgar
Pregunta para reflexionar: ¿Por qué estás agradecido hoy?
Dios, gracias por…. Ayúdame a aprender a ser humilde siendo agradecido. Enséñame a prestar atención a todos los dones de hoy y a dar gracias por ellos. Amén.
Haz justicia: presta atención a las necesidades que te rodean. Ama la bondad: actúa de formas grandes y pequeñas para ayudar a los demás. Camina con humildad: confía en el amor de Dios por ti, y recuerda el amor de Dios por todos.