Following the Star
Ven, sigue a la estrella.
Deja que la luz de Dios ilumine nuestro camino.
No temas.
A la luz de la estrella, el amor guía nuestro camino.
Ven, sigue a la estrella.
Que así sea, porque él libra a los necesitados que claman a los pobres y a los que no tienen quien les ayude. Él tiene compasión de los débiles y los necesitados; salva la vida de los necesitados. Redime sus vidas de la opresión y la violencia; su sangre es preciosa a sus ojos.
Salmo 72:12-14
Al comenzar un nuevo año, el Salmo 72 puede escucharse como un desafío o una carga hacia una nueva forma de estar en el mundo. En la Iglesia primitiva, era un encargo que se utilizaba en las ceremonias en las que la comunidad ensayaba lo que creía que Dios les llamaba a hacer. Las peticiones podían seguir un orden de prioridad, pero fíjate en el efecto del salmo cuando se lee en voz alta. Es una experiencia intensa de atributos que pintan una imagen clara de lo que estamos llamados a ser como pueblo de Dios. Somos personas llamadas a notar. Llamadas a responder. Invitados a unirnos a Dios en la obra de la justicia para los que nacen sin privilegios y los que luchan a diario. En este tiempo de luz, unámonos a esta importante labor que Dios está realizando para que todos los hijos de Dios puedan florecer y prosperar.
Michelle Thomas-Bush
Pregunta para reflexionar:
¿Qué percibes como la mayor necesidad en tu comunidad y quién está respondiendo a esa necesidad?
Santo Dios, me encuentro al comienzo de otro año. Vivo en la incertidumbre del mañana, pero ayúdame a estar preparado para lo que pueda traer el 2025: Si tengo que hablar, ayúdame a hablar con valentía. Si he de trabajar por la justicia, ayúdame a hacerlo con valiente humildad y profunda bondad. Si he de brillar con luz propia, recuérdame que renueve mi fe mediante el culto y la oración. Si he de ser una epifanía, que trabaje para hacer brillar la luz y el amor de Dios en cada rincón de este mundo. Te lo ruego en la noche del que es mi luz, Amén.
Dios nos ha llamado a entrar en un nuevo año como manifestaciones brillantes de luz y amor.
Que nosotros mismos seamos epifanías, iluminando la presencia de Dios en el mundo.
Hoy y siempre brilla.