escucha

Tu palabra es una lámpara ante mis pies y una luz para mi camino.

Salmo 119:105

piensa

¿Qué distancia crees que puedes recorrer en completa oscuridad antes de chocar con algo? La mayoría de nosotros podemos al menos caminar pequeñas distancias en nuestras casas por la noche sin hacernos daño en los dedos de los pies. Pero, ¿qué pasa cuando estamos fuera de casa? Cuando nos sacan de nuestras zonas de confort y de nuestros espacios familiares, de repente nuestra confianza empieza a flaquear. Si Dios te está llamando más allá de lo que siempre has conocido, si hacia donde te diriges no es donde siempre has estado, ¿cómo puedes estar seguro de que no caerás de bruces? Puedes estar seguro porque no te han dejado solo. Incluso ante nuevos retos, circunstancias y preguntas, el testimonio colectivo del pueblo de Dios en las Escrituras está ahí para guiarte sobre lo que significa amar a Dios y amar al prójimo. ¿Se te explicarán todas las respuestas? Probablemente no. Sigue siendo tu vocación dar el siguiente paso, pero lo haces en buena compañía que te ayuda a iluminar tu camino. ¡No estás solo!

Colin Kroll

Pregunta para reflexionar: ¿Cómo pueden las Escrituras arrojar luz sobre tu próximo paso?

Ora

Dios que me llamas más allá de mi zona de confort, ayúdame a recordar que no estoy solo al seguirte. Dame la sabiduría para aprender de los que han venido antes, y la gracia para ser una luz para los demás en sus viajes. Amén.

Ve

Estoy seguro de esto: el que comenzó una buena obra en ti permanecerá contigo para completar el trabajo en el día de Cristo Jesús.

Filipenses 1:6