Tiempo Ordinario

pausa

Dios mío, escucha mis gritos de dolor, ¡atiende a mi oración! Desde el último rincón de la tierra clamo a ti, pues mi corazón desfallece. Ponme a salvo sobre una alta roca, Quiero vivir en tu casa para siempre, protegido debajo de tus alas.

Salmos 61: 1,2,4

¿Qué te preocupa hoy? ¿Qué hay hoy en tu corazón?
Descansa un momento, abre tu mente y corazón, confia en que Dios se preocupa y te guiará.

escucha

Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar. Acepten el yugo que les pongo, y aprendan de mí, que soy paciente y de corazón humilde; así encontrarán descanso.

Mateo 11:28-29

piensa

En mi colegio no se permiten las mochilas en las aulas. No sé si es porque quieren que los alumnos dominen la complicada tarea de abrir una taquilla con combinación, o porque les preocupa que 36 mochilas conviertan el suelo de una clase en una aventura de carrera con obstáculos, o si es para evitar a los profesores el aroma especial de la ropa de gimnasia y las fiambreras de los alumnos de secundaria, a menudo olvidadas en las taquillas durante la noche.

Pero mi aula es un atajo estratégico que evita los ajetreados pasillos, y a menudo los alumnos pasan por ella de camino a casa. Siempre me sorprende lo mucho que pesan sus mochilas repletas.

Sé que hay mucho más que todos llevamos y que puede que no se vea -luchando duramente, llevando pesadas cargas de tristeza, miedo, frustración, alegría (pero sin nadie con quien compartirla), soledad- y toda la complejidad de nuestros corazones, especialmente en semanas como ésta.

Dios conoce las cargas que llevamos.

Dios nos acoge y camina a nuestro lado, mientras trabajamos, mientras jugamos, mientras lloramos.

Que nuestra fe en acción hoy sea simplemente tratar de recordar y confiar en que Dios está con nosotros pase lo que pase.

Molly Logan

Pregunta para Reflexionar:
Cuando ocurren cosas en nuestras escuelas y en nuestro mundo, ¿qué carga y dolor podemos compartir o contar a un amigo, a un familiar, o elevar a Dios en oración? ¿Cómo puedo esforzarme por sentir que no tengo que llevar solo mis cargas hoy?

Ora

Amado Dios, a veces es muy difícil tener fe. Gracias por saber cómo me siento, aunque no esté seguro de lo que siento o no pueda expresarlo en voz alta. Ayúdame a preguntar y a preocuparme cómo se sienten los demás, sabiendo que no tengo por qué llevar su carga, pero que con sólo preguntar les ayudo a sentirse menos agobiados. Gracias por acogerme para encontrar descanso en tu abrazo amoroso, incluso cuando me siento inquieto con la realidad del mundo. Ayúdame a confiar en que descansar en tu amor puede ser también fe en acción. Amén.

Ve

Señor, muéstrame tus caminos; guíame por tus senderos; guíame, encamíname en tu verdad, pues tú eres mi Dios y Salvador. ¡En ti confío a todas horas! Señor, acuérdate del amor y la ternura que siempre nos has manifestado,

Salmos 25:4-6

Que la compasión y el fiel amor de Dios guíen hoy todas nuestras acciones, independientemente de cómo nos sintamos.