Journey to the Cross
Podemos conectar con Dios a través de nuestra respiración.
Inspira lentamente por la nariz y espira por la boca. Hazlo varias veces.
Dios está contigo.
He pedido una cosa al Señores todo lo que busco: vivir en la casa delSeñor todos los días de mi vida, viendo la belleza del Señor y adorando constantemente su templo. Porque me cobijará en su propia morada en tiempos difíciles; me esconderá en un lugar secreto de su propia tienda; me pondrá en alto, seguro sobre una roca.
Salmo 27:4-5
¿Has tenido alguna vez uno de esos días… en los que todo sale bien? Apruebas el examen para el que habías estudiado. Te pierdes en una larga e inesperada conversación con un amigo íntimo. Tu artista favorito lanza una nueva canción, y es un éxito absoluto. Es casi como si la hierba fuera más verde.
Eso es algo así como «ver la belleza del Señor y adorar constantemente su templo», como dice el salmo. Sientes una alegría, una paz y una esperanza abrumadoras. Sientes una profunda gratitud por la presencia y el amor de Dios, y lo único que deseas es estar cerca de Dios, descansar en su gracia. El salmo habla de Dios como nuestro refugio y un lugar donde podemos morar. A menudo nos detenemos en las cosas que nos molestan, entristecen o enfadan. Si descansamos en Dios como nuestro refugio, podemos aprender a morar en la alegría, la paz y la esperanza.
Alex Flannagan
Pregunta para ponderar:
¿Cómo puedes sintonizar tu corazón con la frecuencia de uno de esos días o momentos en los que todo salió bien y llevar ese sentimiento contigo al día de hoy?
Gran Creador, que hiciste los mares, el cielo y la tierra: te doy gracias por los días en que las cosas fueron bien. Dame ojos para buscar y ver lo bueno en cada día, y fortaléceme y protégeme durante los tiempos difíciles, pues tú estás conmigo en ambos. Amén.
La confianza puede tardar mucho tiempo en construirse. ¿Dónde quieres depositar hoy tu confianza?